Los hombres que no amaban a las mujeres
Mikael ha perdido toda su fama y credibilidad por culpa de
una trama organizada por un famoso empresario al que pensaba descubrir, Wennerström.
De repente, Henrik Vagner aparece en su vida ofreciéndole un trato: a cambio de
resolver un asesinato de los 60, él le conseguirá la cabeza de Wennerström.
Lo recomendaría porque sus personajes están muy bien construidos
(especialmente la protagonista femenina: Lizbeth Salender que desempeña el
papel principal en la mayor parte del libro) y por su trama que siempre consigue sorprender.
Eso sí, si eres una persona de gran sensibilidad, será
recomendable que leas otra novela.
La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina
Lizbeth ha desaparecido, pero Mikael debe continuar con su
vida y, apenas un año después del lanzamiento de su libro sobre Wennerström una
pareja llega con unimportante caso de prostitución… que parece estar
relacionada de alguna manera con Lizbeth Salender y su pasado.
Lo recomendaría aunque es más flojo que el anterior, pero el
personaje de Lizbeth aparece más, lo cual es un punto a su favor debido a su
complejidad y particular moralidad. Además, la trama no tiene absolutamente
nada que ver con el anterior, por lo que no existe la posibilidad de sentir
repetición
La princesa en el palacio de las corrientes de aire
Lizbeth Salender ya ha sido encontrada y va a ser llevada a
juicio por el intento de asesinato de Zaladuce. Sin embargo, parece que hay
alguien dispuesto a tomarse muchas molestias para que no hable…
Lo recomendaría, es más para mí es la mejor de la trilogía y
si has leído la anterior, es casi obligatorio leer éste. Una de las mejores
cosas del libro es el repertorio nuevo de personajes, aunque el “súmmum” de la novela
es el juicio, especialmente la estrategia del psicólogo.
